Cómo hacer una agenda personalizada y con ganas de querer
Empieza nuevo curso y con él los buenos propósitos que se cumplirán al 30%, estoy hablando de lo de empezar a estudiar todos los días, tener los apuntes organizados, ir a clase, pasar los ejercicios a limpioZZZzzzzZZZZZ…. En mi caso, ya he pasado la época de estudiante, pero no la de los propósitos, todos los lunes me centro y planifico la semana dejando huecos paporsi. El viernes me doy cuenta de que todo ha salido como le ha dado la gana al cliente o al destino… C’est la vie!
Agendas: ¿Cómo hacer una agenda que te den ganas de usar? ¿Cómo hacer una agenda que quieras llevar siempre? Os enseñaré un par de ejemplos que tengo a mano y unos cuantos consejos que a mi me sirven.
- Personaliza tu agenda con mimo
Tómate tu tiempo, sé curioso/a por una vez en la vida, hombre. Saca el pegamento de barra y tírate un rato recortando chorradas de revistas y quemando la tinta de la impresora. Ponle por encima un forro adhesivo de libros y todo niquelao. Piensa que esto de personalizar agendas sólo se hace una vez al año.
Un ejemplo de lo que hablo es esta bonita composición que le hice a mi chico para su primer día de Máster. Ahora, nos queda como recuerdo de aquel año. :3
- Fabrica tu agenda. Si no tienes dinero para la Moleskine de Lego supermegaguachi de la muerte, hazte una.
Yo soy de dibujar, escribir, anotar, tachar y comerme las hojas con el pincho de la tarde si me apuras. Se me acaban las libretas rápido y por ello, decidí que era un chorrada invertir casi 20 euros en una Moleskine cuando ahora los chinos las tienen por 2 euros, o en mi caso, me las regalan en el curro. Así que… He creado la mía. Todavía la estoy usando porque como me gusta tanto, quiero hacerlo bien. (esto es como las relaciones con los chicos que te importan de verdad).
Puedes pegarle lo que quieras, lo que tengas por casa, crea tu composición y haz que tu agenda sea única. A la basura con esas precocinadas, a menos que sean de las del Carrefour que traen la portada de Hannah Montana, ahí me quito el sombrero.
- Escribe cuando te apetezca y procura hacerlo con gracia.
No te obsesiones con que todos los días tiene que haber algo escrito. Dibuja, escribe con colores diferentes, no te preocupes si tienes que tachar. Y por supuesto… No la tires cuando termines. Es muy nostálgico dar un paseo por agendas antiguas, y más si las has personalizado y llevan un cachito de ti.
Estos son unos ejemplos de mi agenda y la de mi chico, tengo otras pasadas y otras vendrán, pero siempre personalizadas por dentro y por fuera.
Paz, amor, agendas y bolis.